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Una red de malla es un tipo de topología de red en la que cada nodo de la red no solo sirve como punto final para la transmisión de datos, sino que también transmite datos a otros nodos. Para su referencia, aquí hay algunas ventajas de la red de malla:
1. Las redes de malla ofrecen redundancia al proporcionar múltiples rutas para que los datos viajen entre nodos. Si un nodo falla o deja de estar disponible, los datos se pueden redirigir a través de rutas alternativas, lo que garantiza una conectividad continua;
2. Las redes de malla son altamente escalables porque permiten una fácil expansión al agregar nuevos nodos a la red. Esta escalabilidad hace que las redes de malla sean adecuadas para una amplia gama de aplicaciones, desde implementaciones a pequeña escala hasta redes a gran escala que cubren vastas áreas;
3. Las redes de malla tienen capacidades de autorreparación, lo que les permite detectar y adaptarse automáticamente a los cambios en la topología de la red.
1. Las redes de malla ofrecen redundancia al proporcionar múltiples rutas para que los datos viajen entre nodos. Si un nodo falla o deja de estar disponible, los datos se pueden redirigir a través de rutas alternativas, lo que garantiza una conectividad continua;
2. Las redes de malla son altamente escalables porque permiten una fácil expansión al agregar nuevos nodos a la red. Esta escalabilidad hace que las redes de malla sean adecuadas para una amplia gama de aplicaciones, desde implementaciones a pequeña escala hasta redes a gran escala que cubren vastas áreas;
3. Las redes de malla tienen capacidades de autorreparación, lo que les permite detectar y adaptarse automáticamente a los cambios en la topología de la red.