1. Compruebe si el cabezal de la recortadora está dañado o desgastado. Si es así, se recomienda reemplazarlo por uno nuevo.
2. Si el cabezal del recortador no está dañado, es posible que la piel no se haya adaptado a él. Es normal que la piel se irrite ligeramente durante las primeras veces que te afeitas. Se recomienda usar el recortador regularmente (al menos tres veces por semana) durante un período de tres semanas para que su piel pueda adaptarlo lo más rápido posible.
¿Es de utilidad?